29.3.07

 

El arte; la industria

Por Francisco Lucotti

Con el paso del tiempo el concepto del arte ha ido evolucionando o modificándose de acuerdo al contexto histórico de determinada época o región geográfica y de acuerdo a las diferentes corrientes artísticas que se dieron en la Historia. Sin embargo, este concepto fue mantenido relativamente similar desde la Grecia Clásica hasta la segunda mitad del Siglo XIX. Aquí, debido a diferentes razones geopolíticas en Europa, comenzaron a darse algunas manifestaciones que intentaron criticar o modificar la concepción de lo artístico, ya sea como protesta o como simple acto de genialidad vanguardista. Así es como ya en los primeras décadas del Siglo XX, comenzaron a instaurarse el sinfín de vanguardias estéticas que, por motivaciones muy divergentes entre sí, comenzaron no solo a cuestionar el concepto de arte sino a criticarlo, ignorarlo y a denigrarlo e ironizarlo.
La posibilidad de reproducción de las obras de arte ha producido una gran controversia y discusión acerca de las diferentes maneras en que estas obras son resignificadas y adaptadas. Este dilema se basa en la disyuntiva entre la consideración del arte como objeto inmaculable y, por el otro lado, la aceptación de una re-utilización del objeto para diversos fines. Es en este punto en donde vale la pena inmiscuirse, ya que es en estas diversas maneras de reciclar las obras de patrimonio universal en donde reside el mayor choque de ideas e ideales.


Las menciones hacia el arte como algo sacro e inaccesible han quedado atrás; no obstante, una nueva dialéctica está aquí en discusión y está relacionado con la diferencia entre la utilización y manipulación del arte por el mismo arte (moderno y/o postmoderno) en comparación con el utilizado por la publicidad y los medios masivos. Es acá donde nos preguntamos y analizamos los contrastes ideológicos y éticos entre ellos, siendo ambos, a fin de cuentas, prácticamente lo mismo.

La diferencia radica, obviamente, en que el arte filtrado por y para el arte, sigue teniendo algo infinitamente más rico y perenne: substancia o bagaje cultural. El arte moderno comienza con la concientización de que no hay nada más (en cuestión de técnica) por aprender. Por lo tanto, los artistas en vez de buscar la inspiración divina o la llegada de una musa, explotan lo que para el arte clásico era trivial, es decir, la vida cotidiana y todos los elementos de la cultura ya inscritos en lo hondo de la mente de la sociedad, ya sea de lo más banal hasta lo más oculto y morboso del ser humano. El arte en “esencia” sigue buscando lo mismo: la verdad (o su sinónimo postmoderno), sólo que de distinta manera y con distintos y cada vez más “ingeniosos” recursos.


Es indudable la importancia y el carácter intrínseco que existe entre el mercado artístico (museos, galerías, coleccionistas, críticos, historiadores, medios) y una obra determinada. Con esto a lo que me refiero es al valor de cambio de tal o cual pieza u obra y a la relatividad entre la estrechez o concordancia que existe entre estas. ¿Podemos decir que una obra es más o menos valiosa que otra guiándonos por su cotización? ¿Existe siempre un vinculo directo entre la obra y su precio?

Sin lugar a dudas, no.


Por el simple hecho de que una misma obra pueda valer centavos un día y millones al otro y que esto dependa de que el artista tenga la buena o mala suerte de conseguir un promotor o mecenas, esto nos demuestra que el precio de una obra de arte no depende únicamente ni exclusivamente del talento o genio del autor, sino más bien al de su agente comercial (vuelvo a lo mencionado anteriormente). Con esto no se está queriendo menospreciar el talento del artista en absoluto, simplemente se está poniendo en énfasis que no importa tanto que una obra sea artísticamente auténtica sino que se adecue a la demanda.

Comments:
Es interesante si lo relacionas con el post de Greta.

Para agregar a esta discusión, también podrías preguntar si algo producido por un industrial (no por un artista) puede ser considerado una obra de arte.
 
Publicar un comentario



<< Home